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Mostrando las entradas de noviembre, 2018

un corazón agradecido...

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Una de mis fiestas favoritas a pesar de no ser legítimamente nuestra, ni siquiera latina, pero la más bella y enriquecedora de todas, razón suficiente para practicarla... THANKSGIVING!!! Cada día tenemos algo que agradecer, al menos una cosa, estar vivos; porque aún con todos los problemas y dolores que una persona pueda tener, aún existe la oportunidad de enmendar errores, de intentarlo de nuevo, de sentirnos vivos, el que ha muerto ya no tiene oportunidad de nada, por ello si!, estar vivos es un motivo para agradecer. Agradecer por los amigos, por la familia, por las personas que nos quieren o nos han querido, por aquellos que nos han enseñado, y por quienes nos han ayudado, por los amigos que están para darnos su cariño, consejos, tiempo, compañía, un hombro donde llorar, o simplemente estar para escuchar. Agradecer que en medio de los problemas siempre hay una pequeña luz al final, no hay prueba que nos manden que no seamos capaz de superar, nos hace más fuertes, nos

cuando menos lo esperas la Sra. Muerte toca la puerta

Vive! Vive intensamente, cuando menos lo esperas la Sra. Muerte toca la puerta. Vive! Y que nada te detenga, mejor decir lo intenté, lo probé, me entregué, amé, me equivoqué, reí, lloré, antes que decir no sé qué se siente, no conozco eso, viví normal. Si normal es vivir sin emociones entonces que me tilden de loca! Intenta siempre y da lo mejor de tu ser, no importa cuántas veces te hayan golpeado, cuántas veces hayas caído o cuántas veces te hayan lastimado. Saca siempre lo mejor de ti, cada traspié trae una enseñanza que puedes aprovechar para florecer con más colores y vitalidad. Abraza, besa, ama, SIENTE, no te reprimas ni controles porque mañana puede ser tarde, mañana puedes quedarte con el deseo de haber dicho o hecho. La muerte no espera, medio que avisa cuando hay una enfermedad degenerativa, otras veces llega de golpe, pero nunca estamos preparados para abrirle la puerta e invitarle a una tasa de té. VIVE! Sin temores, sin pensar en qué dirán, sin la a